Si finalmente Max Mosley logra que en la parrilla del próximo año sean 28 coches en pista, el antiguo equipo BMW-Sauber estará equipado con motores y transmisiones de Ferrari.
El diario alemán Bild informa que la compra de la escudería BMW por parte de la fundación suiza Qadbak de la escudería alemana ha costado 80 millones de euros.
Por el momento, la escudería ocupa el decimocuarto puesto de la lista de equipos y está convencido de que correrá en 2010; «El equipo tiene previsto pertenecer a la parrilla de la primera carrera de la temporada 2010», anunciaba el comunicado de la escudería.