Fernando Alonso y Esteban Gutiérrez han salido ilesos después de protagonizar un terrorífico accidente la primera carrera de la temporada 2016 de F1, en Australia.
El piloto de McLaren Honda chocó con el Haas del mexicano llegando a la curva 3 del trazado de Melbourne a más de 300 km/h, saliendo despedido el piloto español que acabo dando varias vueltas de campana hasta terminar contra las protecciones.
A pesar de que el MP4-31 ha quedado totalmente destrozado, Fenando Alonso ha podido salir por su propio pie del monoplaza, y ha asegurado estar bien tras pasar por el centro médico para una rápida revisión.
«Me duele un poco todo porque yo creo que se mueve todo en el cuerpo por dentro cuando vas a esas velocidades, un poco la rodilla, mañana me dolerá un poco más, pero a parte de eso, todo perfecto. Quizás un poco decepcionado por no haber terminado la carrera, por no poder acabar con algún punto, también seguramente el destrozo del coche es grande, habremos perdido una unidad de potencia, pondremos ya la segunda rápidamente. Quitando esa frustración inicial, contento de poder estar aquí hablando con vosotros, al final, cuando vas a 300 y pico siempre te juegas la vida. Si en una de esas vueltas, coincide mal el golpe, igual tienes un problema serio así que agradecido y con ganas de que pase este fin de semana».
«Es difícil saber lo que ha pasado, íbamos muy juntos, muy pegados, cogí el rebufo todo lo que pude, iba muy cerca de él, seguramente movimientos tan fuertes y tan cerca de la frenada siempre son un peligro y seguramente tan cerca de él, no me dejó ver también en qué sitio estaba el punto de frenada, perdí seguramente la referencia de eso, frené demasiado tarde y me lo llevé un poco por delante. Es difícil, cuando estás tan cerca, puede pasar eso, es una pena después de un buen fin de semana no poder acabarlo con algún punto«.
Por su parte Esteban Gutiérrez, que lo primero que ha hecho al bajarse de su Haas es ir a ver el estado de Fernando, también ha comentado el accidente: «Fue un momento de mucho miedo ver cómo quedó el coche de Fernando. Cuando lo vi todo en los espejos, lo primero que hice fue salirme lo más rápido que pude del coche y me acerqué a él porque sentí una preocupación de que estuviera bien y un gran alivio cuando vi que todo estaba bien, eso es lo más importante».
«Venía derecho, obviamente sabía que él estaba detrás, salí de la curva dos, él tenía mejores neumáticos, venía saliendo de los pits, no en ese momento pero recientemente. Cuando llegué a la curva, simplemente frené hacia la curva tres, todo fue como una sorpresa, volando por el lado izquierdo mío«.