Tanto Renault como Mercedes han recibido una multa de 50.000 dólares cada una por parte del Consejo de Administración de la FIA por llevar a cabo un pit stop inseguro durante el GP de Hungría.
En el caso de Mercedes, la multa se debe a que el monoplaza de Nico Rosberg perdió el neumático trasero derecho tras cambiarlos en su parada, y este voló por el pit-lane cuando el alemán se dirigía a pista, afortunadamente sin causar daños de importancia pero si lesiones leves a un mecánico de Williams al rebotar en el garaje del equipo.
En el caso de Renault, la penalización se debe a que Robert Kubica fue autorizado a salir de su parada justo en el momento que entraba el Force India de Adrian Sutil, con lo que ambos chocaron. Kubica se retiró varias vueltas más tarde, habiendo realizado un stop-and-go de 10 segundos por ello.