El jefe de la escudería McLaren, Eric Boullier, ha confirmado que el equipo llevará al GP de Australia 2017 un coche casi nuevo, y que el usado en los test es sólo un monoplaza de prueba.
“Se trata de una versión de prueba aquí, así que para nosotros, somos uno de los pocos equipos en el paddock que llegarán a Australia, yo no diría que con un coche B, pero con un coche muy cambiado”.
“Por ahora, están bastante satisfechos en Woking. No necesariamente en términos de potencia, sino que en términos de equilibrio, el comportamiento del coche, la reacción…”.
“Lo que nos habíamos fijado en McLaren, casi todo lo hemos logrado, después los objetivos deportivos serán diferentes. Habrá que esperar a Honda, si tenemos en cuenta lo visto esta semana, con un poco más de rodaje, se dirá”.
Y es aquí donde esta el temor, en el motor Honda, un motor que va a tener mucha faena en la segunda semana de test en Montmeló.
Yusuke Hasegawa, máximo responsable de Honda en la F1, ha dicho que la idea es montar mañana la especificación que se usará en Melbourne: “Sí, se supone que sí, pero con los problemas mecánicos aún discutimos en Sakura y con los ingenieros japoneses sobre ello. Aún son los primeros días, teníamos expectaciones de conseguir más en Barcelona, hay trabajo por hacer. Pero tiene solución, no es realmente serio y no hay problemas en el diseño”.